jueves, 2 de junio de 2011

Ésta semana en lo que a plan-de-adelgazamiento he andando re lenta por no decir perezosa al máximo. No sé con qué tiene realmente que ver ese estado de aletargamiento. Me da rabia comer (no tanto como antes) cosas que engordan: calorías por doquier, grasas, mayonesas, fideos, carbohidratos en general y luego sentirme culpable. Me molesta. Es una culpa con la que no sé lidiar y me da más rabia aún, cada vez que iré de fiesta, ver que la ropa no me sienta como quisiera ni soy tan flaca como la gente de la televisión ni como mis modelos de delgadez a seguir. Me frustra decepcionarme a mí misma, porque tolero decepcionar a cualquiera, pero a mí misma, es abusar, es ser de verdad una estúpida. Debo ponerme manos a la obra AHORA. Solamente hice bicicleta el martes. Algo es algo, pero debería esforzarme mucho más.