Aún no logro bajar de peso ni ser constante, no soy consecuente con lo que quiero ni con lo que busco. Soy una mierda conmigo misma. He bajado como dos kilos pero netamente por acomodación metabólica, no por méritos propios. Debería dejar de comer, ser más drástica, tener un sueño que perseguir: ser delgada y hermosa, para recuperar mi autoestima. Y no lo logro. Quizás no lo deseo con las suficientes fuerzas. Puede que necesite ser así de amorfa para tener una razón tangible para deprimirme, para tener autocompasión. Los cambios parten por cada uno y yo no hago nada. No sé qué es lo que realmente puedo pedir. No existe el hada de la delgadez que toque con su varita mi cuerpo y me convierta en alguien para desear. Puede que pese 84 kilos en éste momento. No tengo certeza de eso. Me odio ahora. Tengo pena pero no ganas de llorar. Me cansé de quienes pensaba que eran mis amigos pero luego descubro que no lo son en base a decepciones y dolores. No puedo más. Debería hacer algo por mí y no por los demás, aunque sea una vez en mi vida.
